¡Alimentos saludables, niños saludables!

¿Cuántas veces te has encontrado con el gran reto de alimentar a tu hijo? ¿Cuántas veces has caído en el gran error de darle lo que más le gusta y lo que menos le alimenta por el sólo hecho de complacerlo y verlo feliz? , pensarás que eres la única en hacerlo, pero como tú, somos muchas las madres que pecamos de inocentes cuando se refiere a la alimentación de nuestros hijos

Y para hacerlo bien, primero hay que ser consientes que la salud y el bienestar de los pequeños dependen principalmente de la alimentación, y la mejor lección que les podemos dar es enseñarles a comer bien. A continuación reglas muy básicas que te guiarán para que tu hijo desarrolle un buen hábito alimenticio.

Más calidad menos cantidad: no caigas en el error de que tu hijo coma demasiado, asegurate de controlar el tamaño de la porciones, estas deben ser no muy grandes pero si muy nutritivas.

Establece un horario para cada comida: es importante que tu pequeño tenga una rutina con la alimentación, comer a deshoras y todo el tiempo puede ser perjudicial tanto para su salud como para su estado emocional.

Frutas y verduras a diario: ofrecele a tu hijo diariamente estos alimentos, ellos aportan gran cantidad de vitaminas, minerales y fibras que fortalecen el sistema inmunológico y regulan muchas funciones importantes del cuerpo.

Beber agua constantemente: es indispensable para que los pequeños se mantengan hidratados. Los jugos y refrescos son recomendables en tiempos puntuales y sin cafeína o azúcar.

Asegurar el calcio diario necesario: para que tenga huesos sanos y fuertes , 3 o 4 raciones de productos lácteos al día son suficientes. No olvides que las opciones descremadas aportan la misma cantidad de calcio que las enteras.

Consumir las proteínas necesarias: pescado, carne, huevo o jamón dos veces al día son suficiente para el crecimiento y la restauración de las células.

Comer los carbohidratos suficientes: patatas, pasta, arroz, cereales y legumbres son la fuente principal de energía para tu pequeño. La energía es necesaria para jugar, estudiar y aprender.

Aprovecha para cocinar con tus hijos y enseñarles como hacer deliciosos platos. Y nunca olvides que el complemento de una buena alimentación es la actividad física, encuentra una que entusiasme a tu hijo y haz que la practique diariamente. Y por último recuerda que tu eres el mejor ejemplo para tu hijo, si te alimentas bien, el también lo hará.

¿Por qué debo dejar ensuciar a mis hijos?

Aunque como mamás nos dé mucha pereza limpiar y lavar la ropa, las manos y la casa después que los niños se ensucian, hoy debo recordarles lo importante que es para el desarrollo de sus chiquitos que aprendamos todos a disfrutar esos momentos de mugre y locura.

Desde que nuestros chiquitos comienzan a despertar en el primer mes de vida, sus sentidos empiezan a funcionar y todo lo que está a su alrededor es una herramienta de aprendizaje. Los colores son fundamentales para que su vista tome forma y sentido. Los olores son esenciales para su olfato. Los sonidos son claves para la audición y los sabores son la herramienta principal para el gusto. Así mismo, las texturas son lo más importante para el tac

Es importante que desde bebés podamos ayudar a nuestros hijos a sentir texturas. A experimentar las cosas duras, blandas, pegoteadas, carrasposas, húmedas o secas. Al tocar estas cosas, los bebés tienen oportunidades valiosas de aprendizaje. Pues los demás sentidos también son estimulados

Las experiencias sensoriales ayudan a los bebés y los niños a identificar olores, colores, reconocer sonidos, y a desarrollar el gusto por los sabores. Dejándolos tocar y sentir, los niños aprenden a usar su cuerpo y tienen unas experiencias de aprendizaje importantes para en su cerebro.

Las texturas y el tacto se trabajan desde bebés y se deben seguir trabajando a medida que van creciendo. Con esto llegan los pegotes, las ensuciadas y las casas o carros sucios. ¡Pero todo esta locura es parte de un aprendizaje muy importante!

Deja que tus hijos toquen y experimenten con cosas no toxicas. Es bueno que se llenen de arena, que jueguen con pantano, que se ensucien jugando en la grama.

Hagan de un día de lluvia, siempre y cuando no haya truenos, una experiencia para bailar y jugar mojándose y salten en los charcos.

Deja que tus niños caminen descalzos en la grama. Así que conectan mas rápido con la naturaleza y aprenden a sentir las texturas de la tierra.

Cocina con tus chiquitos. Amasar y mezclar alimentos con las manos también desarrolla los sentidos.

Déjalos jugar con plastilina, con eso ellos aprenden a darle forma a las cosas. También jugar con pinturas, que se ensucien… después de todo, los mejores artistas de la historia vivían llenos de pintura.

Te invito a relajarte un poquito y gozar con las cosas mas sencillas de la vida para aprender junto a tus hijos.

¡Ensúciense y disfruten! Los pegotes son parte del aprendizaje.